La provincia recibió la visita récord de 25.300 viajeros y sumó casi 42.000 pernoctaciones, según el INE
Zamora continúa con la inercia positiva del pasado año y se desmarca del «parón» del turismo a nivel nacional después de que España despidiera 2017 con cifras de récord. Según los datos provisionales de la Encuesta de Coyuntura Turística Hotelera publicada esta semana por el Instituto Nacional de Estadística, el mes de junio fue el mejor de la historia en Zamora desde que se tienen datos, es decir, desde 1999.
Durante el sexto mes del año, la provincia recibió la grata llegada de 25.318 viajeros frente a los 21.613 que lo hicieron el pasado año durante el mismo periodo o los 17.511 del año 2000, lo que supone una diferencia favorable de casi 8.000 personas respecto a las cifras de comienzo de siglo.
La inmensa mayoría de los turistas que recalaron en la provincia fueron nacionales. En concreto, 22.000 eran residentes en España y apenas 3.000 procedían del extranjero, volviendo a poner de manifiesto que el turismo internacional sigue siendo el talón de Aquiles del sector.
Siguiendo con cifras de récord para este mes, con 41.738 pernoctaciones Zamora pulverizó todos sus registros anteriores, incluso el de 2007, único año en el que hasta ahora se había logrado sobrepasar la barrera de las 39.000. Y en consonancia con el volumen de viajeros, solo el 11% de los que hicieron noche fueron forasteros.
En cuanto a la estancia media, otra de las asignaturas pendientes, también subió ligeramente hasta los 1,65 días, una cifra positiva pero que se sitúa aún por debajo de los 1,71 días de media alcanzados en 2007 y muy lejos, por ejemplo, de Huelva, con más de cuatro.
Tres parámetros -viajeros, pernoctaciones y estancia media-, que vienen a consolidar al turismo como uno de los sectores que «tiran» de la economía en la provincia, tal y como reseña el último informe de España-Duero.
De hecho, según los últimos datos, 556 trabajadores están empleados en Zamora gracias a los 95 establecimientos que en su conjunto ofrecen 1.957 habitaciones y 3.6-25 plazas, cuyo grado de ocupación media es del 38%, diez puntos más durante los fines de semana.
Unos guarismos halagüeños que lo son todavía más en comparación con el Boletín de Coyuntura Turística elaborado por la Junta de Castilla y León, en el que se cifra el número de viajeros de junio en más de 36.000 y las pernoctaciones en casi 60.000.
Según este estudio, además, durante el mes pasado Zamora lideró el grado de ocupación en turismo rural. Por tipos de alojamiento, 1.400 optaron por ir de camping, 900 se decantaron por quedarse en una pensión y casi 700 se alojaron en albergues en una provincia acorde a su nuevo eslogan, «Zamora. Patrimonio Sostenible», que sustituyó, por motivos obvios, al anterior, «Zamora, desconocida perfecta».
Fuente: La Opinión de Zamora